Por la noche fuimos a cenar a la Soda Maravillas (muy recomendable), situada en la calle central de Sta. Elena.
La mayor sorpresa nos la encontramos al día siguiente. Estábamos dispuestos a dirigirnos al Bosque Nuboso de Monteverde cuando el dueño de nuestro hotel nos recomendó ir al Santuario ecológico, menos concurrido y con más oportunidad de ver animales además de más barato (9$).
Qué gozada! Fue una maravilla. Existen varias rutas marcadas con colores e hicimos la que nos recomendaron. Estábamos solos en el bosque! Tuvimos la oportunidad de ver vistas espectaculares en los miradores, cascadas y animales de todo tipo (coatíes, mariposas morpho y de otras clases, una comunidad de monos carablanca, ardillas, tucanes...). Simplemente maravilloso.
Por la tarde, y despues de comer en el la soda Amigos, nos pusimos rumbo a playa Sámara, en el Pacífico (unas 3h y media). Tuvimos dificultades para encontrar alojamiento porque está "full", como ellos dicen. Así que decidimos alojarnos en la colina de Playa Carrillo, y ha sido un acierto. Hemos dormido en Cabinas Colibrí y, aunque es el más caro hasta ahora (20$ por persona) ha valido la pena. Es precioso y los argentinos que la regentan hacen una carne a la parrilla en su restaurante para chuparse los dedos.
Ahora es el momento de descubrir las maravillosas playas.
Pura vida!!